Entrenar o practicar nuevos ejercicios con tu perro, aunque sean ejercicios de obediencia básica, no tiene que ser algo que se te ocurra de un día para otro si quieres hacerlo de forma correcta esperando unos resultados positivos. Planificar las sesiones de práctica con tu perro es un trabajo previo muy importante, sin esta planificación seguramente las sesiones se convierten en un completo desastre. ¿Qué preguntas te debes hacer antes de ponerte a la tarea con tu perro?
Es necesario que seas consciente que para enseñar de forma óptima a tu perro no puedes simplemente salir a la calle, dar un paseo y pensar en un momento dado "Bueno, ahora voy a practicar con el perro". Así, de manera improvisada.
Debes contestarte a estas 8 preguntas antes de pensar en entrenar con el perro:
1. ¿EL QUÉ?
Es obvio que debes saber qué quieres enseñarle antes de ponerte a ello. Salir, decidir durante el paseo que le vas a enseñar un determinado ejercicio y empezar a practicarlo, no es lo más recomendable. Hay que decidirlo antes. ¿Vas a trabajar la llamada, que no tire de la correa o algún otro ejercicio como enseñarle a rodear un objeto? Es muy importante tener claro qué vais a practicar antes de salir.
1. ¿EL QUÉ?
Es obvio que debes saber qué quieres enseñarle antes de ponerte a ello. Salir, decidir durante el paseo que le vas a enseñar un determinado ejercicio y empezar a practicarlo, no es lo más recomendable. Hay que decidirlo antes. ¿Vas a trabajar la llamada, que no tire de la correa o algún otro ejercicio como enseñarle a rodear un objeto? Es muy importante tener claro qué vais a practicar antes de salir.
2. ¿CÓMO?
Está claro que preservando el estado emocional del perro. Pero aquí lo que debes decidir es qué estructura de aprendizaje, o una combinación de ellas, vas a usar:
- Guiado del perro con algo que le motive.
- Usar el Target enseñándole a tocar y/o permanecer en un objeto.
- Modelar con la correa o con las manos (manipulación).
- Usar el moldeado premiando las conductas que interesan de las que nos ofrece el perro.
¿Cuáles son las mejores para el ejercicio a enseñar?
3. ¿CON QUÉ?
Es decir, para poder trabajar con tu perro necesitas saber qué herramientas, objetos y refuerzos vas a utilizar: con correa o con el perro suelto, una cuerda larga, diferentes juguetes u objetos que pueden usarse como reforzadores o elementos de distracción, comida, mobiliario urbano, personas, otros perros... Todo depende de lo que le motive a cada perro y del ejercicio a practicar.
4. ¿CUÁNDO?
Con algunos perros es mejor trabajar al final del día porque están más activos, otros a primera hora. Es necesario conocer cúando tu perro puede estar más receptivo a la información que le quieres transmitir. La época del año también influye: no vas a salir con tu perro a practicar con 40 grados en pleno verano.
5. ¿DÓNDE?
El dónde es muy importante. En fases iniciales del ejercicio es obvio que no es lo mejor ponerse en medio del parque donde sueles ir con tu perro a jugar o a estar con otros perros. Busca y ten previsto varios lugares donde poder ir: patios de colegio, descampados... y otros sitios para cuando el ejercicio evolucione y practicarlo con más distracciones.
6. ¿CUÁNTO TIEMPO?
Uno de los factores en los que se suele cometer más fallos es en la duración de las sesiones. Debes conocer bien las señales que tu perro te puede dar cuando se encuentra incómodo y la situación le empieza a resultar demasiado estresante. Para que haya aprendizaje debe haber cierto nivel de estrés, pero con el tiempo se acumula y el aprendizaje disminuye. En esto, cada perro es distinto.
7. ¿CON QUIÉN?
En ocasiones, dependiendo del ejercicio, puede ser necesario que te acompañe otra persona para que te ayude a practicarlo, como puede ser en la llamada. También es interesante que esta persona pueda grabar en vídeo las sesiones para ver mejor los fallos del perro y, mucho más importante, tus fallos y poder corregirlos.
8. ¿POR QUÉ?
Esta pregunta podría ir la primera. ¿Por qué entrenar o practicar con tu perro? Primero porque es necesario, para la buena convivencia con su familia y el entorno, que el perro sepa ciertos ejercicios básicos para pasear por una ciudad. Y segundo, porque mantener activo el cerebro del perro enseñándole nuevos ejercicios a lo largo de su vida hace que tengas un perro más sano, más equilibrado y es una parte fundamental para tener un perro más feliz.
¿Qué otras cuestiones incluirías? Puedes introducir un comentario exponiéndolas y explicando el por qué 😉
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Creo que faltaría el "¿Para qué?". Muchos perros no tienen necesidad o no son compatibles con ciertas actividades / trucos / etc.
ResponderEliminarEl tener en cuenta si entrenar al perro es para brindarle un bien y al vínculo, o para lucirse uno a costas de las capacidades del animal.