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miércoles, 26 de diciembre de 2012

Coger al perro en brazos: mala idea

Muchos perros de raza pequeña ladran y tienen un mal comportamiento cuando se les acercan personas u otros perros. No es casualidad, lo hacen porque se sienten totalmente inseguros y han aprendido que una persona u otro perro suponen una amenaza para ellos.

Pero, ¿por qué ésto es así? Porque los dueños de estos perros les han transmitido sus inseguridades y miedos cogiéndolos en brazos ya que piensan que no pueden controlar la situación.

Con esta actitud lo que hacen, inconscientemente, es enseñar a sus perros a tener miedo a todo lo que se les acerque y reaccionan ladrando y en ocasiones mordiendo.

Por eso es importante permanecer tranquilos y seguros, dejar que el perro aprenda a gestionar las situaciones que le generan estrés y no transmitirles nuestras inseguridades y miedos.

Si el perro ya tiene este problema, lo mejor que podemos hacer es trabajar con las distancias al estímulo y con su nivel de emoción. Es decir, recompensar al perro cada vez que aparezca el estímulo y que su nivel de emoción (miedo, fobia...) sea bajo, de tal forma que vayamos acortando la distancia y que cada vez tolere un mayor nivel de emoción hasta que el perro sea capaz de autocontrolarse en presencia del estímulo.

En definitiva, A LOS PERROS DE RAZAS PEQUEÑAS NUNCA HAY QUE COGERLOS EN BRAZOS PARA SACARLES DE SITUACIONES COMPROMETIDAS, TENEMOS QUE DEJAR QUE SE ENFRENTEN A ELLAS Y QUE APRENDAN A SOLUCIONAR DICHAS SITUACIONES. Tenemos que darnos cuenta que somos nosotros los que les inducimos su mal comportamiento.

martes, 18 de diciembre de 2012

El contacto visual con tu perro

Solo es salir a la calle para darse cuenta que, tanto si van atados o están sueltos, muchos perros no miran en ningún momento a sus dueños. Entonces, ¿cómo pretendemos tener una buena comunicación con nuestros perros si ni siquiera nos miran a los ojos?

El contacto visual con tu perro es el interruptor que enciende vuestra comunicación y la clave para entender lo que quiere uno del otro.

El hacer que tu perro te mire a los ojos facilita su educación o adiestramiento y fortalece vuestra relación. Trabajar este aspecto hará que el perro vaya más pendiente de tí y busque tu confirmación para saber si su comportamiento o conducta es la correcta.

Trabajar el contacto visual es relativamente sencillo, lo mejor es hacerlo mientras juegas con tu perro:
  • Deja su juguete favorito delante de él sin que pueda tocarlo.
  • En un principio su mirada se centrará en el juguete, ten paciencia y espera hasta que levante la cabeza y te mire a los ojos.
  • Entonces coges su juguete y se lo das.
Repite este ejercicio cada vez que juegues con tu perro y en cualquier situación que le quieras dar una orden (a la hora de comer, al salir por la puerta...). 

Notarás que en pocos días la conexión y la comunicación con tu perro mejorarán y que vuestro vínculo/relación saldrán fortalecidos.

martes, 11 de diciembre de 2012

Los "estados emocionales" del perro

En ocasiones me he referido en algún momento a las emociones del perro y a que influyen en su conducta. En este artículo me propongo explicaros qué son y cómo podemos utilizarlas.

La emoción forma la parte principal del sistema regulatorio del perro junto con la motivación, ambas son procesos involuntarios (no podemos elegir no tener miedo o hambre) destinados a la supervivencia y autodefensa del perro.

Muchos autores no se muestran de acuerdo sobre el significado exacto de "emoción". Esta es la definición que me parece más exacta: "La emoción es un sentimiento involuntario y los estados biológicos, los estados psicológicos y el tipo de tendencias a la acción que la caracterizan".

Donde sí parece haber un consenso es en la utilidad de las emociones: predisponen o dirigen la conducta de forma espontánea en momentos comprometidos donde la respuesta cognitiva resultaría ineficaz por lentitud o ausencia de datos. Ejemplo: si pasamos de noche por un callejón oscuro y nos encontramos de repente con varias personas con malas intenciones, no nos paramos a analizar fríamente la situación. Lo que hacemos es sentir miedo y el miedo le dice a nuestra cognición: no pienses, corre y vete a un lugar seguro.



La dificultad de trabajar con emociones en un perro está en dos puntos concretos, que son involuntarias y que la conducta que generan no se rige por las mismas leyes que la conducta generada por actos cognitivos, por eso no se habla de aprendizaje emocional sino de gestión emocional.

La gestión emocional nos permite influir en conductas emocionales del perro: agresión, miedo, ansiedad, alegría, estrés...Si se ignoran las técnicas de gestión emocional y se usan sólo técnicas conductistas o cognitivas nos darán resultados parciales, incompletos y que fácilmente desaparecen al subir el nivel emocional por encima de aquel en que hemos entrenado al perro.

Hay que tener muy en cuenta que el control cognitivo no se pierde de golpe, se va perdiendo según aumenta la intensidad de la emoción. La emoción en un perro se segmenta en base a la intensidad en un determinado momento, es lo que se denomina estados emocionales del perro: (desde su intensidad mínima hasta la máxima).


>Predisposición emocional

La emoción aparece a un nivel tan bajo que no es reconocida como tal, es un estado de ánimo. El perro debe tener un estado de ánimo positivo para tener una buena predisposición al trabajo que le queremos realizar.


>Inquietud emocional

La emoción es percibida pero resulta fácilmente manejable. En este tramo se trabaja para corregir fobias/ansiedades y enseñar acciones de contracondicionamiento (ejercicio que es incompatible con el que queremos eliminar, ej: miedo, enseñar el JUNTO) a reacciones emocionales inadecuadas.


>Influencia emocional

La emoción es claramente percibida y no puede ser apartada de la actuación del perro influyendo en su conducta. Se exigen al perro los contracondicionamientos enseñados en el tramo anterior para controlar las reacciones emocionales inadecuadas y se enseña a canalizar la emoción en una acción lícita (ej: petardos, huir hacia el dueño). La dirección de la conducta (qué hacer) está controlada por el sistema cognitivo, la forma de la conducta (cómo hacerlo) está controlada por el sistema emocional.


>Dirección emocional


La emoción dirige la conducta y el sistema cognitivo la forma de la conducta. Se canaliza la emoción a través de la acción lícita enseñada en el tramo anterior.


>Rapto emocional

La emoción dirige y determina la conducta. No se puede trabajar con el perro en esta situación. El perro pierde todo su autocontrol y solo podemos imponer un control externo.


La gestión emocional tiene una consecuencia muy interesante: 

Si a través de las conductas emocionales que diseñemos el perro encuentra solución a la emoción que siente empezará a tener seguridad en que puede resolver la situación emocional (huir, si se llega a la seguridad, es una solución al miedo) empezará a tolerar niveles progresivamente más altos de emoción. Por lo tanto, no solo estaremos dándole una alternativa a la emoción que siente el perro, por ej. miedo; sino que además estaremos solucionando el problema de fondo: el perro tendrá cada vez menos miedo.




(Modificado del libro 'Adiestramiento canino cognitivo-emocional' de Carlos Alfonso López García)

domingo, 9 de diciembre de 2012

Control de la conducta higiénica

En bastantes ocasiones me encuentro con dueños que comentan que su cachorro aguanta durante los paseos sin hacer sus necesidades y nada más volver a casa lo hace todo. Esto sucede porque el perro, que no ha salido a pasear durante el periodo de vacunación, no tenía más posibilidad que hacer sus necesidades en el lugar donde ha aprendido: su casa.


Para solucionarlo nos aprovecharemos de que el perro muestra una predisposición a hacer sus cosas en lugares concretos, solo debemos cambiar los de su elección:

Sacaremos al perro de paseo al poco de haber comido ya que es cuando normalmente a los cachorros les entran ganas de orinar y/o defecar. Al cabo de un rato volvemos hacia casa pero cuando estamos en la puerta nos damos la vuelta y volvemos al paseo, repetimos esta mecánica hasta que el perro no pueda aguantar la predisposición que le genera estar a punto de llegar a casa y haga sus necesidades, momento que aprovecharemos para confirmarle (premio).

Cuando el perro ya haga sus necesidades indistintamente en casa y durante el paseo le prohibiremos el acceso a las zonas de la casa donde las hacía para que opte únicamente por el momento y lugar que hemos decidido.

Castigar al perro sólo es útil si se le pilla in fraganti y el castigo adecuado es cortar el acto levantando al perro y dando una voz. NUNCA restregar el hocico del perro en sus deposiciones: es antihigiénico, antieficaz y mezquino.

Sin embargo, hay una serie de casos que requieren un tratamiento especial:

  • Marcaje: las cantidades de orina son pequeñas y el perro es macho. Puede ser temporal si aparece entre los 12 y los 18 meses de edad. El castigo es eficaz si cogemos al perro en el acto. Si la conducta es permanente y el castigo no funciona, la castración suele eliminar el problema.

  • Micción por sumisión-salutación: al entrar el dueño en casa, el perro como parte del saludo emite orina. Es independiente del sexo. Cualquier castigo está contraindicado y agrava la situación. El halago refuerza el comportamiento y lo agrava. Se debe enseñar al perro a sentarse, no a echarse ya que implica sumisión y potencia el problema, cuando llega el dueño. Se le hace permanecer sentado hasta que disminuya su excitación.

  • Micción por excitación: el perro orina sin muestra de sumisión al ser excitado (juego, ruido,...) el tratamiento es el mismo que en el caso anterior, pero el perro puede permanecer también echado.

  • Defecación por miedo: o va asociado a una fobia y se debe tratar como tal o el dueño aplica castigos exagerados. Nunca tratar con castigos.

  • Ansiedad por separación: perros educados orinan y/o defecan en ausencia de los dueños. El tratamiento es el indicado para prevenir la "ansiedad por separación".

Más Consejos: Consejos para enseñar a tu perro una correcta conducta higiénica http://dogguaubilbao.blogspot.com/2016/05/consejos-para-ensenar-tu-perro-una.html