Hay perros que no tienen bien interiorizado el significado del comando NO y sus dueños tienen dificultades para controlar malas acciones a distancia.
El comando NO debe significar para el perro "eso que estás haciendo es incorrecto". Según el tono que le demos variará desde ser informativo para el perro, como decirle frío-frío cuando le estamos enseñando algo y no encuentra la solución correcta, hasta ser una prohibición con carga de autoridad.
La enseñanza del NO enérgico de prohibición es fundamental para la tenencia de un perro ya que nos da la posibilidad de cortar una acción ilícita a distancia y por lo tanto tener más control sobre el perro.
¿Cómo reforzamos el comando NO enérgico de prohibición?
1. Poner al perro una correa larga y a la vez que le decimos NO pisarla y realizar una corrección.
2. Realizar un fuerte sonido con una bocina o con unas palmadas fuertes al mismo tiempo que le decimos NO.
3. Lanzar al lado del perro unas llaves o una botella con algo que haga ruido a la vez que le decimos NO.
Lo importante es cortar la acción ilícita por sorpresa y aprovechar esos escasos segundos de confusión del perro para desviar su atención hacia otra cosa, preferentemente hacia nosotros llamándole y recompensándole cuando llegue a nuestro lado.
Al final, habremos reforzado tanto el comando NO que, sólo con decirlo, el perro dejará de realizar lo que está haciendo y se acercará a nosotros.